Para Vicent Mañes, el presidente d ella federación española de asociaciones de directores de centros públicos, Fedeip, los alumnos de infantil y primaria volverán a la escuela a las horas de siempre.
Mañes dirige el colegio Bertomeu Llorens i Royo de Catarroja (Valencia) y es, además, profesor de inglés.
Pregunta. ¿Puede haber una enseñanza para infantil y primaria que no sea presencial?
Respuesta. No. O al menos debe tener una gran parte de presencialidad. Es una de las cosas que hemos comprobado en este periodo. En secundaria se han podido adaptar mejor por la edad de los alumnos.
P. ¿Qué consecuencias va a tener para ellos pasar, hasta que llegue septiembre, casi medio año sin ir a la escuela?
R. Vamos a intentar que sea el mínimo posible, es difícil de evaluar. Hay opiniones diversas, pero la mayoría coincide en que tres meses sin clase, vacaciones de verano aparte, no es tanto si las cosas se hacen bien después.
P. Pero los pedagogos advierten de que, además de conocimientos, los alumnos también están perdiendo competencias básicas y hábitos de estudio.
R. Las situaciones son muy variadas. Los alumnos que han tenido un buen soporte familiar se verán menos afectados. Los que no, habrán sufrido también en lo emocional, y tendremos que tener en cuenta ese impacto.
P. ¿Cómo tiene que ser la vuelta de los alumnos a la escuela el curso que viene?
R. Los de infantil y primaria tienen que volver a diario. Las soluciones de una semana sí, una no, o similares, en estas etapas no sirven. Para ello tenemos que adoptar medidas organizativas.
P. ¿Cómo está su centro para acoger a todos los alumnos en grupos de 15 como mucho?
R. Mi centro tiene ocho aulas de primaria y tres de infantil, y no disponemos de espacios adicionales más allá de una pequeña aula de psicomotricidad y un comedor pequeño.
P. Varias comunidades tienen previsto utilizar espacios municipales e incluso de secundaria. También la ministra Isabel Celaá ha apuntado en la misma dirección, con profesores suficientes.
R. Podría ser una opción, aunque conlleva problemas de traslado, de transporte y servicios complementarios, como el comedor. A lo mejor las actividades complementarias sí podrían hacerse en esos otros espacios.
P. Algunas voces denuncian que hay sindicatos y organizaciones profesionales del profesorado que no están haciendo lo suficiente en esta crisis educativa. ¿Qué opina?
R. Con los requerimientos sanitarios que hemos tenido hasta ahora es imposible que los alumnos de tres a 12 años estén en el centro.
Estamos preparando la adaptación para septiembre y aquí vamos a empezar a atender tutorías de padres y de alumnos.
No es una cuestión de proteger al profesorado, que está trabajando desde su casa muchísimas más horas. Usamos plataformas digitales y herramientas a las que ni nosotros ni los alumnos están acostumbrados.
Fuente: El País
Deja tu comentario